En la gran soledad, En el huracán,
de la inmensa que destruyó
y devastadora, las casas,
pero inevitable sociedad. del humilde poblado.
Yo te escribo. Yo te escribo.
En mi silencio, Pero si te escribo,
que quiere gritar, ¡ayúdame!
pero se queda Porque lo necesitaré.
tan sólo aquí dentro.
Yo te escribo. Pero si te escribo,
¡ven a mí!
En esas noches Y escúchame.
sin estrellas,
y sin luna Pero si te escribo,
que nos iluminan. ¡mírame!
Yo te escribo Y hazme sonreír.
En el corazón, Porque si te escribo,
que yace sin vida es que no podré
dentro de ése, seguir vivo.
de aquél muerto.
Yo te escribo. Porque si te escribo,
es que mis ojos
En la lágrima se cerraron.
que resbala,
por la mejilla Porque si te escribo,
de una niña. es que la esperanza
Yo te escribo. se alejo de mi.
Laura Martín Torres.
27 de enero del 2004
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